Biografía de María Plakhova

Blog de la biografía de maría Plakhova

Enrique Sánchez

1/19/20244 min leer

Imagen de la pintora emérita rusa María Plakhova
Imagen de la pintora emérita rusa María Plakhova

María Plakhova comenzó su carrera artística como decoradora de escenario en los mejores teatros de Moscú (Teatro de Bellas Artes de Moscú). La joven pintora, trabajando con los maestros más importantes de la dirección dramática de mediados del siglo XX, se hizo famosa como autora de las decoraciones pictóricas de la serie de obras teatrales de argumento histórico basadas en los dramas de Pushkin, Ostrovski, Dostoevski, lo que dio lugar a la aparición de la serie de cuadros “Monumentos de Rusia” en los cuales María Plakhova perpetra los mejores monumentos de la escenografía rusa (“Boris Godunov”,”Plañideras”,”Después de la Oración”). Una de las obras mas importantes de María Plakhova fuero sus decoraciones para el ballet “Las Siete Bellas” para el festival de ballet de París en 1969 por las que fue condecorada con una medalla de plata (Algunos de los esbozos de las mencionadas decoracio es se presentaron en esa exposición). La etapa teatral se quedó atrás, quedándose en la memoria como una de las épocas de búsqueda de su destino artístico y trayendo recuerdos a sus cuadros con elementos de eufemismos teatrales y efectos específicos (serie “Pañuelito Ruso”.”Rusia , Invierno”,”Cantina”) a través de los cuáles la pintora demuestra su dominio del color, el encanto de los pueblos y pequeñas ciudades rusas como también Españolas, libertad de composición. Hablando de la obra de María como pintora no se puede omitir su faceta de viajera nata. En el pasado los pintores de dedicaban a viajar, a participar en las expediciones científicas. Sus ilustraciones no sólo adornaban los volúmenes de los famosos descubridores sino que ofrecían una información importantísima para diferentes ramas científicas.

María Plakhova supo realizar un gran aporte en la labor de las expediciones de la Academia de Ciencias de Rusia al crear obras no solo de valor artístico sino también educativo. En los años 70-80 del siglo XX María Plakhova viaja y trabaja junto con su esposo, el también pintor Emérito de Ruso Boris Alekseev. Esta unión demuestra la afinidad en los caminos a seguir: la definición romántica del Arte. Ambos fueron Ávidos descubridores, inspirados no solo por la oportunidad de enseñar lo que pocos han visto sino por el deseo de compartir con el resto sus conocimientos y sentimientos. Surcaron miles y miles de millas oceánicas en barcos científicos, juntos visitaron los rincón es más recónditos de los confines del mundo: Reino Tonga, costas de Papúa Nueva Guinéa, islas y arrecifes perdidos donde recopilaron material único para sus obras “Encuentro en el Oceano”,”Las hogueras de Tonga”, Etc.. El periplo que duró varios meses no fue un crucero en un buque confortable sino un gran trabajo que requirió una resistencia sin par, capacidad de adaptación a unas condiciones especiales cuando el caballete vive una vida propia y se mueve en un baile tormentoso y la tierra firme sólo la pisas en los sueños.. Los artistas se convertían día tras día en testigos fehacientes de los descubrimientos y como resultado, ofrecieron al mundo, aparte de sus obras, tres libros de viaje “Oceanía, Lejana y Cercana”,”Hacia las Islas del Índico”,”Creación del milagro en las dunas de Kara Kum”, todos ellos con las reproducciones de los autores. Un lugar especial en la obra de María Plakhova lo tiene el Océano que se retrata con todos sus procesos, toda su versatilidad, de día y de noche, de tarde y de mañana. María Plakhova tiene ese talento que no deja de sorprender; Su obra es admirable e inquietante. Como todas artes, como la poesía o la música, una buena pintura no deja indiferente ni al alma más impasible. No es fácil sentir el arte pictórico. La percepción visual del otro no siempre coincide con la idea del pintor, su visión y manera interpretativa, sobre todo en la actualidad, cuando el público recibe una avalancha de resultados de diferentes vertientes, búsquedas y experimentos artísticos. A menudo, después de haber contemplado técnicas truculentas, lo que siente uno es fatiga y añoranza por lo verdaderamente bello y exquisito que haga ver el mundo real con un toque de fantasía e interpretación personal del artista que permita descubrir lo sorprendente en lo cotidiano, en la luz del día, en la noche, en el sol y el viento, en todo…..Pero una sola carga informativa no puede ser componente principal de la pintura porque cansa y aburre con su fría sensatez de la copia de lo que nos rodea. Le hace falta un ímpetu mágico del arte que sepa despertar emociones y quedarse en la memoria para mucho tiempo. Así es la palabra del artista, la razón de su obra. Ésa es la línea en la que hemos de contemplar el talento de la pintora maestra y Emérita Rusa María Plakhova que, de una manera comprensible y espléndida, nos ofrece Su Palabra y nos empuja hacia un camino de aventura y descubrimiento, hacia el saber y el futuro.

La exposición de María Plakhova dedicada a su 80-aniversario naturalmente no pudo incluir todos sus cuadros, así como sus otras exposiciones en Rusia, en salas de más renombre como por ejemplo, galería Tretiakov, Academia de las Bellas Artes, etc... La mayoría de sus obras se encuentran en diversos museos y colecciones particulares y no pueden ser sacadas de ahí. Parte de ellas, que estuvieron expuestas en el XIV Congreso Internacional del Pacífico, fueron adquiridas por la Academia de Ciencias de Rusia y otras instituciones científicas internacionales, fondos de cultura…. Partes de su obra marcan las etapas más representativas de su vida y obra y que dan una visión de magnitud y solidez de su talento cuyos cimientos son propios de la espiritualidad y humanismo de la escuela tradicional artística rusa. María Plakhova, siempre será una respetable pintora con un marcado carácter impulsivo, temperamental y emocional. Muchas de sus obras se basan en la acción teatral donde el argumento se desarrolla según las leyes de la vida y la fantasía. La envergadura colorista y el efecto de la luz de sus composiciones revelan su talento escenográfico (“Recuerdos de Venezia”).

Imagen de la pintor emérito ruso Boris Alekseev y de la pintora emérita rusa María Plakhova
Imagen de la pintor emérito ruso Boris Alekseev y de la pintora emérita rusa María Plakhova

María Plakhova y su esposo Boris Alekseev

María Plakhova